36. Filipenses 4:14-22 - Fruto que abunde en nuestra cuenta.

14 Sin embargo, habéis hecho bien en compartir conmigo en mi aflicción. 15 Y vosotros mismos también sabéis, filipenses, que al comienzo de la predicación del evangelio, después que partí de Macedonia, ninguna iglesia compartió conmigo en cuestión de dar y recibir, sino vosotros solos; 16 porque aun a Tesalónica enviasteis dádivas más de una vez para mis necesidades. 17 No es que busque la dádiva en sí, sino que busco fruto que aumente en vuestra cuenta. 18 Pero lo he recibido todo y tengo abundancia; estoy bien abastecido, habiendo recibido de Epafrodito lo que habéis enviado: fragante aroma, sacrificio aceptable, agradable a Dios. 19 Y mi Dios proveerá a todas vuestras necesidades, conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús. 20 A nuestro Dios y Padre sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén. 21 Saludad a todos los santos en Cristo Jesús. Los hermanos que están conmigo os saludan. 22 Todos los santos os saludan, especialmente los de la casa del César. 23 La gracia del Señor Jesucristo sea con vuestro espíritu .

Pablo le hace saber a los Filipenses que ellos son quienes han participado en su sostenimiento más que otras iglesias, como les dijo también a los corintios:

2 Corintios 11:9 LBLA

y cuando estaba con vosotros y tuve necesidad, a nadie fui carga; porque cuando los hermanos llegaron de Macedonia, suplieron plenamente mi necesidad, y en todo me guardé, y me guardaré, de seros carga.

Pero no es la dádiva en sí lo que busca, pues Dios ha sido fiel en su sostenimiento, e incluso otras veces ha tenido que trabajar él mismo para encargarse de ello.  Pablo, busca fruto que abunde en la cuenta de ellos. Busca riqueza celestial y no material para los filipenses:

Lucas 12:29-34 LBLA

29 Vosotros, pues, no busquéis qué habéis de comer, ni qué habéis de beber, y no estéis preocupados. 30 Porque los pueblos del mundo buscan ansiosamente todas estas cosas; pero vuestro Padre sabe que necesitáis estas cosas. 31 Mas buscad su reino, y estas cosas os serán añadidas. 32 No temas, rebaño pequeño, porque vuestro Padre ha decidido daros el reino. 33 Vended vuestras posesiones y dad limosnas; haceos bolsas que no se deterioran, un tesoro en los cielos que no se agota, donde no se acerca ningún ladrón ni la polilla destruye. 34 Porque donde esté vuestro tesoro, allí también estará vuestro corazón.

Ahora que ha recibido todo y tiene abundancia (más de lo necesario). Pablo describe esta ofrenda como fragante aroma, sacrificio aceptable. Como nos dice efesios 5;2, el sacrificio de Cristo fue fragante aroma para Dios, y esto fue porque este sacrificio representó el amor de Cristo para con nosotros, poniendo nuestra salvación y beneficio eterno, aun antes que su propio bienestar. De esta misma manera, cuando nosotros sacrificamos de alguna manera algo que es nuestro, a favor de algún hermano en necesidad o en favor de la obra del Señor, este es sacrificio aceptable, fragante aroma, pues refleja el amor fraternal que sólo Dios nos pudo dar a través de la reconciliación con Él por medio de Cristo Jesús.

Efesios 5:2 LBLA

y andad en amor, así como también Cristo os amó y se dio a sí mismo por nosotros, ofrenda y sacrificio a Dios, como fragante aroma.

Finalmente, como lo prometió el Señor, al estar los filipenses utilizando sus recursos para lo eterno, no quedarían desamparados, Dios proveerá para sus necesidades conforme a sus riquezas en gloria.

2 Corintios 9:8 LBLA

Y Dios puede hacer que toda gracia abunde para vosotros, a fin de que teniendo siempre todo lo suficiente en todas las cosas, abundéis para toda buena obra;

Es importante notar en este versículo que la abundancia que Dios nos otorga es para que nosotros abundemos en toda buena obra, no para abundar en todo lujo o para almacenar en graneros (o cuentas de banco) más grandes, sino para ser generosos en buenas obras.

Aplicación:

En este presente, Pablo pudo ver mucho más que la provisión de Dios para cubrir sus necesidades. Pudo ver un corazón comprometido de los filipenses para el ministerio de Pablo y con la obra del Señor. En este corazón pudo ver un regalo sacrificial, que era olor fragante para el Señor, pues mostraba el amor por el Señor y su obra y pudo ver confianza en que Dios supliría las necesidades de ellos, por lo que podrían desprenderse de sus recursos sin temor al futuro.

Dios nos ayude a imitar esta actitud de Pablo y los filipenses a hacer lo mismo. Seamos generosos para la obra del Señor, no buscando retener mucho para esta tierra, sino buscando hacer una cuenta grande en los cielos. Mostrando el amor que Dios ha puesto en nosotros por su obra y por los hermanos; y teniendo confianza en que el Señor suplirá nuestras necesidades futuras por lo que podemos dar sin temor a que en un futuro nos faltará. En lugar de retenerlo para unos años adelante, enviémoslo por adelantado para una eternidad.

Oración:

Padre, es fácil decir estas cosas o escribirlas en un papel, pero sólo tu Santo Espíritu trabajando en nosotros puede hacer este cambio de corazón, liberándonos del egoísmo, de la vanidad de acumular para lo temporal, y del temor hacia el futuro. Te pedimos hagas un cambio en tu iglesia, para que seamos transformados y podamos mostrar este amor y confianza. En el nombre de Jesús. Amén.

Preguntas de reflexión de Filipenses 4:10-21

1. ¿Qué puedes aprender de la forma de ver el dinero de Pablo?
2. ¿Cómo cambiaría nuestra vida si tuviéramos su visión?
3. ¿Cuando es nuestra ofrenda un aroma fragante a Dios?

Por: Raúl Orozco. www.EstudiemosLaPalabra.com

👂🏼 ▶El audio del estudio está disponible en audio (pensando en que sea una ayuda a los débiles visuales, o personas que aprenden mejor escuchando,sólo busca el día que corresponde hoy para que lo escuches desde la lista de reproducción del estudio: https://soundcloud.com/user-23579622